Nuestros amigos del dojo Zen de Utrera tienen nueva página web.
Esperamos que sea una herramienta útil en la difusión de esta práctica milenaria.
www.dojozendeutrera.jimdo.com
Asociación Yoga y Meditación de Los Palacios y Villafranca
miércoles, 14 de enero de 2015
martes, 7 de enero de 2014
sábado, 4 de enero de 2014
jueves, 25 de octubre de 2012
jueves, 7 de junio de 2012
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miércoles, 6 de junio de 2012
Zazen en Sei Kô (Los Palacios y Villafranca)
En el Zen se utiliza a veces la metáfora del polluelo que, cuando está a punto
de nacer, lucha por liberarse del cascarón.
Por un lado, la madre picotea desde el exterior para que el polluelo se libere de la única realidad que ha conocido hasta entonces: el cascarón. Pero por otro, el mismo polluelo, intuitivamente, también picotea desde dentro para alcanzar la libertad.
La realidad del interior del cascarón no está en contraposición de la realidad que se expande fuera de éste, sino que está incluída en ella.
Cuando el poder del universo, en su discurrir vital y la aspiración personal del polluelo van en la misma dirección, la eclosión se produce naturalmente.
Nosotros, todavía polluelos, picamos un poco aquí y ahora, en este dojo Sei Kò, picamos en el pequeño dojo de Utrera, en Seikyuji, en casa... El universo, la vida, nos ofrece este espacio y este tiempo; nos coloca cerca de amigos de la Vía, nos presenta a un maestro. ¿Cómo podríamos dejar pasar esta oportunidad?
En el Shoboguenzo Zuimonki Dogen enseña:
El Dharma de Buda no prosperará de verdad si los que practican la Vía, aunque solo sea un momento permanecen sentados en una choza de hiervas o bajo los árboles, meditando sobre la enseñanza. En la actualidad, me afano intensamente en hacer colectas para construir una sala para la práctica de zazen, pero no estoy seguro de que este considerable trabajo haga prosperar el Dharma. No obstante, no quiero dejar pasar los días y los meses sin hacer nada.
Observando detenidamente la aspiración que demostraban los antiguos, el esfuerzo de los que practicaron la Vía en tiempos más difíciles, con condiciones más desfavorables ¿Cómo podríamos permanecer tranquilamente acomodados dentro del cascarón de nuestro propio egoísmo? Este es un punto importante sobre el que reflexionar, más aún cuando la vida nos proporciona un espacio como este y nos presenta a un maestro. Esta, es una posibilidad maravillosa que no todos los seres humanos tienen. Debemos cuidar este tesoro.
José Luis Kô Kon.
Por un lado, la madre picotea desde el exterior para que el polluelo se libere de la única realidad que ha conocido hasta entonces: el cascarón. Pero por otro, el mismo polluelo, intuitivamente, también picotea desde dentro para alcanzar la libertad.
La realidad del interior del cascarón no está en contraposición de la realidad que se expande fuera de éste, sino que está incluída en ella.
Cuando el poder del universo, en su discurrir vital y la aspiración personal del polluelo van en la misma dirección, la eclosión se produce naturalmente.
Nosotros, todavía polluelos, picamos un poco aquí y ahora, en este dojo Sei Kò, picamos en el pequeño dojo de Utrera, en Seikyuji, en casa... El universo, la vida, nos ofrece este espacio y este tiempo; nos coloca cerca de amigos de la Vía, nos presenta a un maestro. ¿Cómo podríamos dejar pasar esta oportunidad?
En el Shoboguenzo Zuimonki Dogen enseña:
El Dharma de Buda no prosperará de verdad si los que practican la Vía, aunque solo sea un momento permanecen sentados en una choza de hiervas o bajo los árboles, meditando sobre la enseñanza. En la actualidad, me afano intensamente en hacer colectas para construir una sala para la práctica de zazen, pero no estoy seguro de que este considerable trabajo haga prosperar el Dharma. No obstante, no quiero dejar pasar los días y los meses sin hacer nada.
Observando detenidamente la aspiración que demostraban los antiguos, el esfuerzo de los que practicaron la Vía en tiempos más difíciles, con condiciones más desfavorables ¿Cómo podríamos permanecer tranquilamente acomodados dentro del cascarón de nuestro propio egoísmo? Este es un punto importante sobre el que reflexionar, más aún cuando la vida nos proporciona un espacio como este y nos presenta a un maestro. Esta, es una posibilidad maravillosa que no todos los seres humanos tienen. Debemos cuidar este tesoro.
José Luis Kô Kon.
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